viernes, 4 de diciembre de 2009

ESTAS FECHAS.




Si, que bellas son las calles, las casas, sobre todo las de los más pudientes, que sin reparo hacen gala de excesos en el gasto de energía eléctrica, pero todo sea por prepararse para la gran noche, no niego que es inevitable llegar a contagiarse con tanta algarabía, sobre todo si hay una pequeñita que con ese brillo en sus ojos pide que los adornos salgan de donde están guardados, y pone manos a la obra, hoy la casa ya luce con esos adornos navideños, incluso creo hay algunos nuevos, o tal vez no me había fijado en ellos, mejor no pregunto, no sea que me lleve un regaño.
En estas fechas no puedo dejar de recordar a mi Padre, cuando en ese pequeño departamento en que pasamos un buen tramo de vida, lo veía cuando se quedaba con la vista fija en el ''nacimiento" y se podía quedar por horas y yo tratando de adivinar que había en su mente, y cuando el tiempo lo alcanza a uno, me he descubierto haciendo lo mismo, y no lo sé de cierto, pero creo saber en lo que pensaba, y es en lo mismo que yo pienso, simplemente imagino que las cosas mejorarán algún día, que esos ojitos brillantes no pueden estar equivocados al sentir que cada año al festejar el cumpleaños de ese niñito, la esperanza en una vida mejor, no puede estar lejos. Felices fiestas, queridos amigos, reciban un fuerte abrazo lleno de esperanza y que la salud reine en todos sus hogares.

2 comentarios:

Beth dijo...

La Navidad no la celebra mejor quien más tiene en sentido económico, sino quien más riqueza interior tiene. Es el momento que todos deberíamos aprovechar para recordar aún más aquellos seres queridos que compartían anteriores navidades con nosotros: al familiar, al amigo, y que ya no están con nosotros, o mejor dicho, sí que los están, pero “no visibles”.

La Navidad, es la emoción que se refleja en los ojos de tu hija al contemplar el Belén, en su alegria al preparar los adornos navideños o las reflexiones que ante el Belén hacia tu padre y ahora tu.

El verdadero espirítu navideño es el que aflora en silencio en medio de la algarabía que se produce en “el exterior”. No la celebra mejor quien más regalos da y más regalos obtiene. Pues el mayor regalo de la Navidad es celebrarla con la gente que queremos, estén presentes o en nuestro corazón.

BETO, FELIZ NAVIDAD PARA TI Y TU FAMILIA, ASI COMO PARA TODOS LOS QUE VISITAN ESTE BLOG.

Alicia dijo...

Si, Beth tiene razón, disfruta de las Navidades, no te pierdas ni un detalle de las expresiones de tu hija, de sus sentimientos, de sus sueños.
Es un momento mágico para ella y para ti también.
Estoy segura que estas Navidades van a ser muy especiales para ti.
Y me alegro de todo corazón.
Felices Navidades para todos y disfrutenlas al máximo.
Epoca de amor, de felicidad, de amistad.
Sueños cumplidos para muchos, esperanzas nuevas para otros.
¿Que más se puede pedir?
Yo pediré un deseo como cada año. aunque sé que no se cumplirá.
Pero la esperanza nunca se pierde.
FELIZ NAVIDAD Y MEJOR INICIO DE AÑO.